Antiguamente, en el ayuntamiento de Serantes, había una villa llamada Doniños habitada por paganos a excepción de una pareja que tenían su casa algo apartada. Pasó por allí Nuestro Señor pidiendo alojamiento donde había más abundancia. Pero le arrojaron de allí con cajas destempladas. Sin embargo, nuestra pareja le invitó a pasar a su cabaña, le dieron su magra comida y le dejaron su lecho de pajas para dormir. Al día siguiente, vieron que el peregrino había desaparecido. El hombre fue a su trabajo y cuando llegaba a la villa oyó a su mujer que le llamaba urgentemente. Fue a ver pero cuando llegó junto a ella, ésta le dijo que ella no lo había llamado. En ese momento se oyó un gran estruendo de aguas. Marido y mujer miraron hacia la villa y vieron que era inundada por un gran torrente que surgió de entre unos peñascos. Allí quedó sumergida la villa de Doniños.
Leyenda enviada por Juan Carlos
3 comentarios:
Joer, qué malo el tipo, y qué curiosa la leyenda.
Yo me sabia la leyenda de otra manera... le llaman el lago de Doniños porque, segun mi abuela, ubo unas inundaciones en ese pueblo y ahi mismo donde se encuentra el lago habia una casa donde meses antes habian nacido gemelos. El agua submergio todo y solo quedaron, flotando los niños en un cesto de mimbre. De ahi el nombre de Doniños. Puede ser que fuese invencion de la gente, pero a mi me gusta pensar que fue asi.
Mi familia lleva generaciones viviendo en Doniños , y a mí me han contando la misma leyenda que comenta Anónimo, la de los dos niños.
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